miércoles, 18 de abril de 2012

EL ÉXITO Y LA IMPECABILIDAD


“PARA TENER ÉXITO SÓLO EXISTE UNA FÓRMULA, Y ES DARLO ABSOLUTAMENTE TODO.” (Vince Lombardi)



¿Estás ofreciendo el 100% de tu potencial a la vida? ¿Lo das todo de ti cada día?… Estas son preguntas importantes porque te invitan a reflexionar sobre si realmente estás poniendo en juego todo tu potencial en la vida. 

Muchas personas viven sus vidas como si creyesen estar en un “ensayo general”. Esto no es ningún ensayo general, esta es tu vida. Y está pasando…¿A qué estás esperando?

Decide empezar a darlo todo cada día y verás de que modo se revolucionan tus resultados.
(Texto recibido de mi amigo Felipe).

¿Qué es "darlo todo"? La IMPECABILIDAD.


Impecabilidad quiere decir "sin pecado". Significa hacer las cosas por el motivo correcto, con las intenciones puras, hacerlo lo mejor posible, sin ostensión, sin pereza. Hacer lo que hay que hacer y hacerlo bien, todo lo bien que cada uno pueda hacerlo.

Objetivo, metas, procedimientos, medios correctos. Limpios. Legales, humanos.

Y después, dejarle los resultados a la vida.


Es como lanzar una flecha: sé dónde he de dar, así que coloco mi cuerpo y la flecha (todo junto, haciendo un único bloque) en posición. 
Me adapto a las circunstancias (viento, obstáculos, si la diana es móvil, observo su velocidad, posición y movimiento). 
Mantengo la respiración, apunto y suelto la flecha.  Una vez suelta la flecha, ya lo he hecho TODO. 
El resto ya no depende de mi.

Con esta condición, el fracaso, en sí, no existe. Puede producirse un resultado que yo no deseaba, y puedo utilizar este dato para tenerlo en cuenta la próxima vez. Yo dí todo lo que podía, sabía y tenía, con mi mejor disposición, con esperanza, con confianza,  así que no me puedo culpar de no haber dado en el blanco. 



No todo depende, pues, de mi. Siempre habrá variables que yo no controlo. Yo no soy dios. No soy todopoderosa, soy humana, falible. Lo sé y lo asumo como un parte intrínseca de mi, una de tantas características que me son propias como ser vivo que soy.


No es válida tampoco la razón de echar las culpas a lo externo. En toda situación, yo pongo una parte, los demás pondrán otra, las circunstancias añaden otras variables que pueden o no ser controlables. Asignar las culpas a una sola parte es un autoengaño absurdo, o un intento de manipulación. Yo estaba ahí, así que sólo por el hecho de "estar", aun sin hacer nada, en algo he influido. Todo está interconectado, nos dice la física cuántica.



Lo que está claro es que si estoy motivada, si doy lo mejor de mi, si mis intenciones son buenas/correctas, si realizo el procedimiento óptimo para obtener el resultado que deseo (poniendo esa parte que depende de mi), tengo muchísimas más posibilidades de obtener éxito.


Porque al menos para mi, éxito significa también "haberlo intentado", estando satisfecha con lo que yo he dado.


1 comentario:

  1. Nunca te justifiques a ti mismo con nadie. Porque la persona que te quiere no lo necesita y la persona que no te quiere no te creerá.

    ResponderEliminar